“Me acabo de enterar por los medios de comunicación que me relevaron del cargo que ocupaba, sin la más mínima comunicación personal, ni un llamado telefónico, ni siquiera un mensaje de texto”, así comienza el descargo que realizó Stella Maris Córdoba, tras ser echada del Instituto Provincial de la Vivienda.
La ex funcionaria se encuentra descansando en Estados Unidos desde hace varios días.
En su descargo, dijo que su desplazamiento “no es fruto de un sorteo fallido del que no estuve a cargo y en el que probablemente haya algún error, porque es de público conocimiento que me encontraba en uso de licencia, autorizada por el gobernador interino y el ministro”.
“Ambos conocían mi destino en el exterior y el motivo familiar del viaje”, agregó.
Córdoba sostuvo que desde que ella se hizo cargo del IPVDU llevaron adelante una gestión de reactivación de la política de vivienda, terminando y estrenando 1500 casas. “Obtuvimos el financiamiento del programa reconstruir para terminar por fin Manantial Sur, las obras programa PROMat que permitieron construir en tiempo récord de casas que se necesitaban para relocalizar a las familias de Simoca y construir la fábrica de dulces de batata”, dijo.
“Estos y muchos logros más fueron compartidos junto al gobernador interino como la entrega de la casa número 50.000 junto al presidente”, dijo.
Añadió que “la transparencia con sorteos públicos de ubicación y ahora para designación de adjudicatarios, como la atención de cada conflicto de cara a la gente fue la impronta de nuestro trabajo”.
Finalmente, agradeció a militantes y colaboradores y expresó: “como en todo lo que hago mi compromiso estuvo al 100%”.