La automotriz Toyota trasladará desde Japón a Argentina la oficina de su División para Latinoamérica y el Caribe, desde la que coordinará las operaciones de 37 distribuidores independientes que la compañía posee en 36 países de la región, informó este viernes Presidencia.
Mauricio Macri recibió esta mañana al titular de Toyota, Takeshi Uchiyamada, en una audiencia celebrada en la residencia de Olivos.
En la reunión, en la que también participaron el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, el director ejecutivo de la empresa para Latinoamérica y el Caribe, Masahiro Inoue, y el de Argentina, Daniel Herrero, el directivo japonésanunció el traslado de la LACD a la planta de la compañía en Zárate, en la provincia de Buenos Aires.
Esto permitirá incorporar más personal y fomenta el desarrollo de profesionales argentinos.
Esta nueva oficina que Toyota establecerá en Argentina coordinará, según las fuentes, la operación de 37 distribuidores independientes que la compañía posee en 36 países de América Latina y el Caribe.
La Casa Rosada informó que Uchiyamada destacó el “fuerte liderazgo” de Macri por las medidas que viene tomando el Gobierno en favor de una “apertura comercial de mayor alcance” y le agradeció las políticas de incentivos aplicadas al desarrollo de vehículos con nuevas tecnologías.
Toyota, que opera en la Latinoamérica y el Caribe desde hace 66 años, cuenta con cuatro plantas de producción de vehículos, dos plantas de piezas para automóviles y un Centro de Entrenamiento.
La compañía japonesa, que dará a conocer sus últimos resultados trimestrales globales el 2 de agosto próximo, redujo el beneficio neto de su ejercicio fiscal de 2018 en un 24,5 %, hasta los 1,88 billones de yenes (17.296 millones de dólares), a pesar del incremento de sus ventas en China y en Europa.
Durante el último ejercicio fiscal nipón, comprendido entre abril de 2018 y el pasado marzo, el gigante japonés del motor registró un beneficio operativo de 2,47 billones de yenes (22.724 millones de dólares), un 2,8 % interanual más.
El mayor fabricante nipón de vehículos, que aspira a reforzar su posición en Estados Unidos y China, en un momento marcado por las tensiones comerciales entre las dos mayores economías mundiales