En el marco de un nuevo ida y vuelta entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner, finalmente, en marzo no se descontará el 5% de aumento de diciembre para los jubilados. Esto se debe a que una vez más, el bloque kirchnerista de la Cámara alta le realiza cambios a una iniciativa enviada por el Poder Ejecutivo hace apenas unos cinco días. De esta manera, lo que pretende la vicepresidenta es intentar salir absuelta del ajuste a los jubilados.
Lo central, es que el kirchnerismo pidió que el 5% de aumento que se otorgó para el mes de diciembre a los jubilados no se tome a cuenta y no se les quite en el primer aumento del año próximo que debía ocurrir en el mes de marzo. Y para que, de esta manera, las jubilaciones futuras se calculen tomando como base el mejor salario promedio. Lo interesante es saber cómo se cocinó este inesperado cambio.
Pues resulta que varios senadores mantuvieron extensas conversaciones con el Ministerio de Economía, Martín Guzmán, el de Trabajo, Claudio Moroni, y la titular de ANSES, Fernanda Raverta, integrante de la agrupación La Cámpora, por lo que tiene línea directa con Máximo y Cristina Kirchner. De esta manera, a Alberto Fernández no le quedó más alternativa que aceptar el pedido de la vicepresidenta.
Pero además, lo cierto es que existía mucho malestar en la Cámara de Diputados donde iba a ser muy difícil votar la ley por el amplio rechazo que despertaba. Es por ello que en el mediodía se les envió un mensaje a los senadores avisando de la cancelación de su tratamiento en el recinto de la Cámara baja, en la que estaba previsto que participaran Moroni y Raverta, por lo que se la pasó para hoy a las 11 horas.
En definitiva, a partir de las modificaciones introducidas por el kirchnerismo, el aumento del 5% no será a cuenta del que se otorgará en marzo. Pero esa no sería la única novedad que aconteció ayer, y es que ni lerdo ni perezoso, Alberto Fernández no quiso quedarse atrás y entonces el Gobierno nacional modificará el proyecto de movilidad jubilatoria, para que los aumentos sean trimestrales en lugar de semestrales como estaba planeado.
De esta manera, habrá cuatro incrementos por año. La decisión se tomó para empalmar los meses de enero, febrero y marzo, que estaban afuera de la actualización, porque la fórmula del anterior Gobierno de Mauricio Macri se aprobó en diciembre de 2017, pero empezó a regir en marzo de 2018. En este sentido, el proyecto sobre la nueva fórmula de aumento de haberes previsionales contemplará un mix de índices de recaudación y de evolución salarial.
De todas maneras, no debe perderse de vista que no se trata más que de cambios superficiales y que no son más que apenas maquillaje para intentar tapar el enorme ajuste que se hará con los jubilados debido a que la nueva ley de movilidad jubilatoria no contempla el índice de inflación. Pero la sociedad no es ingenua y lo tiene muy presente y sabe que un 5% no resuelve ni remotamente el problema de los bajos haberes en Argentina.
