La interna del sindicato de Comercio ya empezó a tomar temperatura y atraer las miradas del mundo gremial. Dos apellidos excluyentes aparecen en el centro de la escena: el de Armando Cavalieri, quien mantiene en suspenso su decisión de ir por su décimo mandato consecutivo, y el de los Moyano, que aparecen dispuestos a meterse en la pelea y apoyar a la oposición liderada por Ramón Muerza.
Ante la consulta de PERFIL, el oficialismo sindical no se muestra preocupado ante esta amenaza. Aseguran estar concentrados en la gestión y repiten que “falta mucho para el proceso electoral”, que se inicia con noventa días de anticipación para poner en marcha distintos mecanismos institucionales. Si bien no se descarta la continuidad de Cavalieri, en el gremio resaltan la figura de Carlos Pérez, un posible sucesor, actual secretario de Asistencia Social del sindicato y titular de Osecac, la obra social mercantil, desde el último mandato de Cavalieri.
Bajo su gestión, en plena pandemia en 2020, fue uno de los impulsores, junto a José Lingeri, de que los hoteles puedan albergar pacientes con coronavirus y alojar a los repatriados residentes de la Ciudad que debían hacer cuarentena. Pérez señaló, en ese momento, que la intención del gremio fue “contribuir para que el sistema de salud local amplíe su capacidad de alojamiento. Es importante que pongamos todo nuestro esfuerzo ante esta situación, que seamos responsables y tomemos los recaudos necesarios”.
Desde su entorno, resaltan que su tarea al frente de la obra social “estuvo a la altura de las expectativas” y le quitan valor al rol que puedan tener los Moyano en la próxima contienda electoral. De hecho, fuentes gremiales afirman que los líderes camioneros solo buscan “meterse en la interna para conseguir más congresales y así influir en los sufragios de la CGT”.
Del otro lado, Muerza, buscará este año, como ya lo hizo en 2018, convertirse en el secretario general de la seccional Capital Federal, la más grande del país. Aunque todavía no se fijó la fecha, ya está en carrera: su espacio comenzó a pegar en los barrios porteños afiches con la leyenda “Muerza 2022 por más salario y salud”. Ante PERFIL, remarca que una de sus cartas de valor en esta disputa es el total respaldo de los Moyano. “Tenemos una relación de amistad de hace muchos años”, define su vínculo con los referentes de Camioneros. A su vez, sostiene que cuenta con el aval de los afiliados, tras la última elección que perdió por solo 415 votos. Y duda de la participación de Cavalieri.
Desde el moyanismo también colocan interrogantes sobre el futuro de un peso pesado del sindicalismo. Hasta el momento, si “el gitano” decide encarar una nueva gestión, los Moyano cerrarán filas y estarán junto a Muerza para intentar desbancar al experimentado dirigente. Pero si da un paso al costado, el escenario cambia y Hugo y Pablo podrían tomar “una prudente distancia”.
Facundo Moyano, en cambio, apostará sin dudas por una modificación en la conducción en Comercio. Ya lo indicó en unas de sus últimas apariciones públicas, junto a Muerza, con quien tiene un diálogo muy fluido y comparte actividades: “Se vienen cambios importantes para los trabajadores y para el movimiento obrero en general. Hace unos meses dije que teníamos que discutir la democracia sindical, el rol de la mujer y el impacto de la tecnología en el trabajo. Esas discusiones se están materializando en hechos concretos”, sostuvo.