Si la insensibilidad fuera una franquicia cinematográfica, el alfarismo ya tendría más películas que Rocky Balboa. Y es que no conforme con haber dejado el año pasado a cientos de familias sin el ingreso diario que les proveía trabajar en el Mercado del Norte, luego avanzó contra el sustento diario que a duras penas se ganaban los cuidacoches. Pero el colmo de la impúdica y inescrupulosa gestión de Germán Alfaro se viralizó ayer martes.
Y es que mucho revuelo generó en las redes sociales una serie de fotos de un funcionario municipal capitalino descansando en Miami. Las imágenes muestran al secretario de Obras Publicas de la Capital, Alfredo Toscano, disfrutando a pleno con su esposa en las playas de la Florida, en Estados Unidos. El momento no podría haber sido más inoportuno y desnuda completamente el desdén del alfarismo.
Esto se debe al hecho de que en Tucumán en particular y en Argentina en general, encontrar trabajo y dólares es lo más parecido a una misión imposible. Sin embargo, uno de los mandaderos de Germán Alfaro (el perrito faldero según lo tratan hacia el interior de Juntos por el Cambio), no tuvo problema alguno para hacerse de las divisas necesarias para costear un viaje tan caro como lo son vacaciones en Estados Unidos.
Quedó claro que, si al alfarismo no le importa dejar familias en la calle sin el más mínimo ingreso ahora que se implementó el nuevo sistema de estacionamiento, mucho menos le iba a importar la peor crisis económica de la Argentina desde la vuelta de la democracia. Y es que, con la misma facilidad con la que expulsaron a los cuidacoches de las calles, también Toscano pudo conseguir dólares frescos para pasear por Miami.
Ahora bien, cabe preguntarse entonces: ¿De dónde obtuvo los dólares este funcionario cuando nadie más puede conseguirlos? Salvo que alguien robe un banco, es imposible obtener un mísero dólar. A propósito de ello, ¿Acaso es que así los consiguió Toscano? De hecho, hacia el interior de Juntos por el Cambio, deslizaban esta posibilidad, es decir, la chance de que Toscano hubiera conseguido las divisas de manera espuria.
En ese sentido, murmuran el los pasillos de la 9 de Julio y Lavalle, que con el ingreso que tiene Toscano por la función que ocupa de ninguna manera podría comprar dólares. Y es que hicieron hincapié en el hecho de que él mantiene dos ex mujeres además de la actual siendo que, además, tiene 8 hijos. Y el nivel de vida que ostenta dista mucho de los menos de $300.000 que habría cobrado este mes por la función que ocupa.
Sin embargo, se da el lujo de vivir en un country ubicado fuera de la capital que a la fecha carece de cloacas y agua potable, mientras que el propio Toscano puede mantener a una docena de personas y viajar hacia Estados Unidos sin que se afecte en nada su nivel de vida que resulta obsceno cuando se recuerda que los habitantes de San Miguel de Tucumán muchas veces deben lidiar con materia fecal como resultado de la saturación de la infraestructura de la ciudad.
Justamente, Toscano es nada menos que el titular de la Secretaría de Obras Públicas de la capital, una que, lejos de exhibir infraestructura que descomprima la descomunal saturación de la ciudad, sólo cuenta emprendimientos polémicos como la de la plaza Independencia que costó $400 millones, o la de la peatonal o la de las esferas de piedra inútiles de calle 25 de Mayo que luego fueron retiradas.
Según algunas versiones, la filtración de las imágenes sería fruto de las internas que cruzan a la oposición en Tucumán. Al menos, es lo que intentaron instalar de parte del alfarismo para desviar la atención. Claro, no se les ocurrió mejor idea que soltar este tipo de versiones en lugar de dar las correspondientes y necesarias explicaciones. En ese sentido, aturde el silencio que guarda acerca de este tema el mismísimo Germán Alfaro.
Y es que el viaje realizado por Toscano resulta grave, ya no sólo por el insensible pavoneo suyo acerca de lo costoso en medio de una garrafal crisis económica y social como la que atraviesa el país. Sino que es todavía más gravoso el hecho de que se trata de nada menos que de la mano derecha del propio intendente que hasta, incluso, suena como uno de los potables “herederos” a reemplazar a Alfaro en la conducción de la intendencia.
Pero, además, como si esto no fuera lo suficientemente grave, cabe hacer hincapié en que no se trata de un funcionario cualquiera. Sino que se trata del secretario de Obras Públicas, un área siempre sensible ya que es la puerta de entrada para hacer maniobras fraudulentas por medio de las cuales los funcionarios obtienen coimas y se valen de sobreprecios para “morder” de allí una buena tajada.
¿Acaso es casualidad que el único funcionario de Germán Alfaro que puede costear tamaño viaje de placer, tan caro como inoportuno, sea quien tenga a mano el presupuesto oneroso de las obras públicas ausentes en la capital? ¿Es acaso de allí donde Toscano obtuvo la financiación de su viaje a Miami? Y es que los números “no le dan”. ¿Cómo puede ser entonces que “le alcance” para viajar a Estados Unidos por turismo de placer?
Su propia mujer dijo que siete meses de gestación lleva el fruto del amor por Toscano. ¿Acaso el viaje a Miami es “fruto” de la gestación de algún plan espurio para obtener las divisas para así poder viajar? ¿El dinero que faltarían en las inexistentes obras que necesitan los vecinos de la capital sobran en el presupuesto que demandó el viaje del funcionario más cercano a Germán Alfaro? ¿No debería el intendente decir algo al respecto?
Peor aún, ¿Es el mismísimo Germán Alfaro acaso cómplice de alguna supuesta maniobra fraudulenta que le permitió a Toscano hacerse de recursos frescos para viajar a Estados Unidos? De no ser así, ¿El intendente no es responsable de la falta de transparencia de la Secretaría de Obras Públicas? No en vano el dicho asegura que el que calla otorga. Y Alfaro no hace más que incriminarse más y más por medio de su silencio.
