Las estafas bancarias siguen a la orden del día y más en épocas en la que se cobra el medio aguinaldo. Por medio del contactless, con un cartón o una regla magnética y, ahora, con ataques térmicos, los delincuentes se pueden hacer de datos valiosos para vaciar tu cuenta bancaria.
Este último método se basa en aprovechar las huellas de calor que deja una persona, que minutos antes ejecutó una transacción en un cajero que está ubicado en la calle.
¿En qué consisten los ataques térmicos en los cajeros?
En un informe de Kaspersky Lab, la compañía internacional dedicada a la seguridad informática, que utiliza un estudio de la Universidad de California en San Diego, el sistema de ataques térmicos no consiste en atacar a la víctima cuando está usando el servicio de un cajero automático.
Por el contrario, el robo se consuma luego de que las personas insertan su tarjeta de débito, ingresa la clave y recogen su dinero. Luego de unos segundos de que el cliente del banco se retire, rápidamente otra persona se aproxima y utiliza una cámara térmica para captar los rastros de calor que hay en el teclado del cajero. Así, los delincuentes pueden conocer los números que conforman la clave de seguridad del usuario.
Esto se produce debido a que la cámara térmica ofrece una imagen infrarroja que resalta los botones que una persona presionó cuando ingresó su PIN y los criminales pueden recolectar los números para luego obtener el código de la víctima.
Para concretarlo, no solamente es necesario poseer una cámara térmica de alta sensibilidad que ayude a distinguir las variaciones de temperatura, sino que la captura del rastro de calor debe tomarse cuanto antes, debido a que de otro modo el registro se perderá. Este método es acompañado de una técnica que permite clonar la tarjeta.
¿Cómo evitar este tipo de ataque?
En principio, se debe recordar que los bancos ofrecen el servicio de retiro sin utilizar la tarjeta de débito, funcionalidad a la que se puede acceder mediante la app oficial de la entidad. Al emplear este recurso bloquea por completo la posibilidad de sufrir un ataque térmico, puesto que el usuario no emplea su clave de seguridad ni el plástico para conseguir dinero de un cajero.
Asimismo, las aplicaciones para celulares cuentan con una opción para realizar pagos digitales, por los que las personas no tienen la necesidad de hacer un retiro de dinero para costear ciertas compras.
