Cansados de realizar reclamos a la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT), los vecinos del barrio SEOC III decidieron solucionar ellos mismos el problema: usaron pico y pala para arreglar las calles.
Rosa Beatriz Sierra le comentó a LA GACETA que el conflicto ocurre en la Manzana I y H. “El colectivo dejó de pasar por el estado del camino y la gente de la zona tuvo que arreglarlo por su cuenta”.
“Gracias al trabajo que se hizo, el ómnibus de la línea 5 volvió a circular. Esto es por la pérdida de agua que se produce por las conexiones clandestinas y cloacas reventadas”, agregó la vecina.
Por último, Sierra sostuvo que el barrio se encuentra en el olvido. “Carecemos de higiene, seguridad, de todo y en todos los aspectos”, concluyó la mujer.