Los empleados de comercio despertaron con la buena noticia de que, al menos hasta el mes de septiembre, podrán tener la posibilidad de trabajar sólo hasta las 19 horas. ¿O no? Al menos, la Cámara de Comercio capitalina aceptó obedecer el horario corrido dispuesto por el COE en el marco de la pandemia que azota al país a lo largo y a lo ancho de su territorio. Ahora bien, ¿Lo aceptarán los empresarios?
En ese marco, desde la asociación aconsejaron a sus afiliados acatar la recomendación de las autoridades de trabajar hasta las 19. No obstante, la modalidad de trabajo dependerá de los dueños, quienes se muestran reticentes a volver al horario corrido puesto en funcionamiento durante buena parte del año pasado, cuando la pandemia llegó a la Argentina y que se transformó en una modalidad que culminó con la llegada del verano a Tucumán.
Y es que cabe recordar que un dato no menor implica que un total de más de 240 locales cerraron durante la pandemia. De todos modos, la Cámara de Comercio de San Miguel de Tucumán convocó en el día de ayer a sus asociados acatar el horario de atención establecido por el Comité Operativo de Emergencia, ante el aumento de casos de coronavirus. Pero esta decisión también tiene otro trasfondo.
Y es que además se trata de una solicitud realizada por el Ministerio Público Fiscal, al menos, hasta que disminuyan los contagios en nuestra ciudad. Con este anuncio, los locales, principalmente del microcentro, deberían trabajar de 10 a 19, con el objetivo de unificar un horario y no perder ventas ante la confusión que hoy existe frente a la atención comercial. Sobre si la modalidad de trabajo será cortada o corrida.
Pero desde la Cámara indicaron también que los comerciantes tienen la libertad de elegir las modalidades más convenientes. En ese sentido, cada comerciante decidirá cómo se organiza con sus colaboradores, más teniendo en cuenta que esta es una medida que no muchos podrán llevar a cabo debido a la delicada situación del sector. Y, como si fuera poco, está claro que Germán Alfaro se lavará las manos de este conflicto.
Lo dispuesto por un decreto municipal que autorizaba la apertura de los locales hasta las 21 ahora pende de un hilo tras un fallo judicial adverso que le daba la razón a los trabajadores del sector. Es por ello que la Cámara de Comercio hizo la convocatoria a sus asociados para tratar de conseguir un ordenamiento en los horarios, todo esto en un marco de crisis económica profundizada en marzo de 2020.
Pero ni esa crisis ni ninguna otra le toca de cerca al intendente capitalino que prefiere que sean otros los que paguen los platos rotos. Lo que desconoce Germán Alfaro, es que su ineptitud y falta de compromiso a la hora de velar por los intereses colectivos, no harán más que profundizar su imagen para con la sociedad en lo que hace a un Poncio Pilato de San Miguel de Tucumán, que se lava las manos.
