Alan Cuevas y su hermano retornaban a su hogar después de una jornada de trabajo.
El pasado sábado, cerca de las 19.00, caminaban por la zona sur de la Capital (prefirieron no revelar la ubicación exacta del lugar por su propia seguridad ya que viven cerca de donde ocurrió el hecho) cuando fueron asaltados por dos delincuentes en motocicleta.
Las víctimas aseguran que están con vida de milagro porque a los delincuentes se les escapó un disparo y después gatillaron pero los proyectiles no salieron.
“Estábamos regresando con mi hermano de trabajar. Sabemos que todo está muy inseguro así que tratamos de no manejarnos solos. Íbamos caminando y se nos cruzó una moto. Se bajó el de atrás y le dijo a mi hermano que le dé la mochila. Mi hermano se resistió un poco y ahí dispararon a la zona de los pies, se les escapó el disparo”, comentó Alan, una de las víctimas.
Y cerró, “nos gatillaron tres veces más a la altura del pecho”. Por suerte para ellos, los disparos no salieron.