En el acto aniversario por los 30 años del atentado contra la Embajada de Israel en Buenos Aires, ante la ausencia del presidente Alberto Fernández, el Gobierno envió a cuatro funcionarios y mientras las autoridades israelíes apuntaron a Irán y a Hezbollah, el ministro de Justicia Martín Soria, acusó al Poder Judicial y deslizó críticas a Mauricio Macri. Mientras decía eso, el diputado Waldo Wolff se retiró.
“Aquel triste día los terroristas lograron su cometido, golpear a la Argentina y golpear a Israel causando muerte, dolor y sufrimiento y un profundo sentimiento de indefensión en nuestros pueblos”, comenzó Soria, único orador del Estado argentino.
Entre los presentes, por parte del oficialismo estaban el canciller Santiago Cafiero; el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro; y el ministro de Defensa, Jorge Taiana. Mientras que por la oposición estuvo el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, acompañado de Fernando Straface, secretario General y Relaciones Internacionales de la Ciudad.
Y también los diputados nacionales Wolff, Hernán Lombardi y la senadora de Juntos por el Cambio de Santa Fe, Carolina Losada, entre otros.
“En nombre del Estado argentino, de nuestro gobierno, vengo a decir ‘presente’, y hacer una más de las miles de voces a lo largo y ancho de nuestro país, y en todo el mundo, siguen manteniendo viva la memoria y reclamando Justicia por quienes aún hoy no están con nosotros”, continuó Soria.
“No podemos decir que se haya conseguido la verdad, y mucho menos que se haya hecho Justicia por las víctimas del atentado a la embajada de Israel. Esa dolorosa cuenta sigue aún pendiente. Así como las víctimas, sus familiares y los sobrevivientes tienen derecho a que se haga Justicia, también toda la sociedad tiene derecho a saber qué sucedió”, remarcó el ministro de Justicia.
Y apuntó entonces a la Justicia: “Es el Poder Judicial, la Justicia, la que debe investigar y encontrar a los culpables de ambos atentados. Y es el poder político del Estado el que tiene que garantizar todo el apoyo posible para encontrar y castigar a los responsables. Se requieren hechos, no palabras”.
“Una muestra es que por orden del Presidente hace pocos meses atrás hemos reactivado, puesto nuevamente en funcionamiento, la unidad especial de colaboración con la investigación del atentado a la sede de la AMIA que funcionaba desde el 2000 en la órbita del ministerio de Justicia de la Nación y que tiene por función brindar todo el apoyo a la Justicia y a la fiscalía”, remarcó Soria.
La cruzada oficialista contra los jueces se mezcló así en una fecha de luto. Pero Soria fue más allá en su embate que pareció más digno de campaña. Y le apuntó al expresidente.
Dijo Soria sobre aquella gestión: “Volvimos a poner en funcionamiento la unidad especial que en 2018, lamentablemente había sido desmantelada. Estamos concluyendo las obras de reacondicionamiento de las instalaciones del Palacio Barolo, necesarias para evitar que toda la documentación vinculada a los atentados se deteriore”.
“La falta de esclarecimiento de ambos atentados nos muestra las dos caras de una misma moneda. En ambos casos, en el atentado a la sede de la embajada y a la AMIA, el denominador común es el nulo avance de las causas judiciales, que genera dolorosa impunidad“, concluyó el ministro Soria.
El desplante de Waldo Wolff
En medio del discurso del ministro de Justicia, el diputado de Juntos por el Cambio Waldo Wolff se retiró caminando por delante del representante del Gobierno.
Y después se expresó en las redes: “Siento vergüenza. Hoy es orador en el acto aniversario atentado Embajada de Israel el Ministro Martin Soria. Hace algunos días este Gobierno validaba la presencia en Nicaragua de acusados Iraníes del atentado AMIA, y hoy vienen a poner cara de compromiso. Hipocresía e impunidad”.
“Llevo a mis hijos todos los días a colegios con pilotes por atentados de Irán. Me parece una hipocresía escuchar al ministro Martin Soria de este gobierno que se abraza con Iraníes darme un discurso en este aniversario del atentado a la embajada”, concluyó Wolff, en una segunda publicación en la que mostró cómo se retiraba en un video grabado por otra persona.
Argumentaría luego Wolff que la razón de su desplante no fue la solapada crítica al expresidente sino que el funcionario de Alberto Fernández omitiera mencionar a Irán en su alocución.
Fue una actitud similar a la que protagonizó en la Asamblea Legislativa, cuando el Presidente criticó a su antecesor Macri por la toma de deuda con el FMI y los legisladores del PRO se retiraron del Congreso.
El acto por el recuerdo de las víctimas de un atentado no parecía el lugar para toda la escena suscitada.
Alberto Fernández, la Corte, el atentado y un tuit
Luego de finalizado el acto, Alberto Fernández, ausente en el mismo, dejó un mensaje en Twitter.
“A 30 años del atentado a la #EmbajadaDeIsrael, ratifico mi compromiso contra la impunidad. Seguimos reclamando justicia y buscando a los responsables de este hecho atroz que le quitó la vida a 29 personas. En Argentina respetamos y celebramos la diversidad de credos y culturas”, posteó con una foto de las banderas argentina e israelí, entre escombros..
El Presidente había recibido a las autoridades del Congreso Judío Latinoamericano (CJL) el miércoles, ante quienes ratificó su compromiso contra la impunidad, en el marco del 30° aniversario del atentado a la embajada de Israel.
A 30 años del atentado terrorista que destruyó la sede diplomática, la investigación sigue abierta en la Justicia argentina, sin que se haya logrado detener a sospechoso alguno, pese a dos órdenes de captura internacional todavía vigentes.
a Corte Suprema de Justicia tiene a cargo la pesquisa por ser de su competencia originaria, ya que se trató de un ataque a una sede diplomática extranjera y dio ya por probado cómo ocurrieron los hechos y la responsabilidad del movimiento fundamentalista islámico Hezbollah.
El máximo tribunal renovó las alertas rojas de Interpol contra dos de los acusados por el atentado contra la embajada de Israel.
DS