El Consejo de la Magistratura informó a la Justicia que aún no desarrolló una plataforma que permita hacer de manera remota el juicio oral y público donde la vicepresidenta Cristina Kirchner está acusada de ser la jefa de una asociación ilícita relacionada con la asignación de obras públicas durante su gobierno. Los consejeros estiman que les llevará entre dos y cuatro semanas tener lista la herramienta adecuada.
El Tribunal Oral Federal N° 2, integrado por los jueces Rodrigo Giménez Uriburu, Jorge Gorini y Andrés Basso, preguntó si era posible seguir adelante con el juicio, que requiere de 50 conexiones de videoconferencias simultáneas.
La respuesta llegó por mail de parte de Ricardo Noziglia Wilde, director de Tecnología del Consejo, que informó: “Por el momento nos encontramos en etapa de elaboración de nuevas soluciones, que cuando los superiores así lo indiquen, se encontrarán en condiciones de satisfacer lo requerido”.
El Consejo cuenta con una plataforma que tiene 122 puertos habilitados para todo el país, pero cada uno requiere la instalación de un programa VPN para trabajar con la computadora de manera remota. Y cuenta con algunos puertos externos, pero pocos.
No es un sistema adecuado para juicios grandes como el de la obra pública, pues solo este proceso insumiría casi la mitad de los recursos disponibles y habría dificultades para que declaren los testigos.
Por eso, se trabaja en una plataforma más flexible, tipo Jitsimeet, Zoom o Skype, y los sistemas de seguridad adecuados para que las partes puedan participar.
Estos problemas se dan el juicio contra Cristina Kirchner, pero en otros, con menos acusados y menos abogados, es posible seguir trabajando. Ayer mismo se continuó con un juicio oral contra Ricardo Echegaray y el Tribunal Oral Federal N° 3 está trabajando para reiniciar de manera remota el juicio contra Carlos Telleldín por el ataque a la AMIA, donde el exreducidor de autos y abogado es el único acusado.
