El programa consiste en la entrega de materiales para la construcción de viviendas o mejoramientos de casas en comunas y municipios, en el marco de este programa de autoconstrucción, mediante la incorporación de un grupo de familias en su ejecución, comprometiéndose a aportar su trabajo diario.
Estuvieron presentes: el ministro del Interior, Darío Monteros; el secretario de Obras Públicas, Luis Pérez; la interventora del IPVDU, Nora Belloni; el presidente del ERSEPT, Luis Morghenstein; legisladores, intendentes y comisionados comunales.
“Es una alegría poder ayudar a este grupo de familias que, por sus ingresos o por no contar con un trabajo estable, no pueden tener la posibilidad y el acceso a una vivienda propia. Por eso, este programa se inscribe dentro de una política habitacional que tenemos en la provincia de Tucumán”, sostuvo Jaldo.
Asimismo, remarcó que se trata de un sector social vulnerable en el que se fomenta el trabajo en equipo, con la participación de la familia para contribuir a la construcción de la casa propia. Además, se convoca a las autoridades locales, como los comisionados comunales, intendentes y comunidades originarias, que “conjuntamente con el Gobierno de la Provincia, que es el que entrega los materiales necesarios para la construcción de una vivienda, las intendencias y comunas ayudan con la mano de obra”.
Por su parte, la interventora del IPVDU, Nora Belloni, informó que “fueron 147 viviendas las que recibieron órdenes de materiales en la primera etapa, con una inversión de $274 millones y en la segunda etapa, entregadas este martes, fueron 150 viviendas, por $439 millones”.
Para el 2024 el IPVDU hizo “una previsión de $600 millones más para la tercera etapa, cuyas inscripciones están abiertas para las comunas y municipios faltantes”.
¿Cómo se ejecuta el programa?
La metodología de trabajo consiste en la autoconstrucción asistida y participativa por esfuerzo propio y ayuda mutua, con colaboración de los municipios y comunas rurales.
Las casas deben contar con una construcción tradicional con materiales conocidos, de acuerdo a la planificación del IPVDU. Son de 47 metros cuadrados con todos los rubros que contiene una vivienda, como revoques, terminaciones de fino, pinturas, revestimientos, pisos, techos de chapas, tanques de agua, veredas perimetrales y todo lo necesario para que una familia ingrese y haga uso de la vivienda.
Gustavo Marcial, comisionado comunal de Villa Quinteros, destacó la importancia de que los habitantes de su pueblo reciban el beneficio de Promat: “en tiempos donde se cuestiona tanto la obra pública, que hoy programas provinciales de estas características puedan llegar a cinco familias en situación de vulnerabilidad muy grande, habla del proyecto inclusivo que tiene el Gobierno de la Provincia para el interior”.
