La Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap) reclamó al Gobierno nacional impulsar y “sacar” una ley federal del transporte para igualar los subsidios” entre el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y las provincias del interior del país. En esa línea, la entidad exhortó “a las autoridades nacionales, a los gobernadores e intendentes a asumir la responsabilidad que les cabe en la prestación del servicio público al ser titulares, y que es su obligación garantizar y sostener”.
Asimismo, solicitó la conformación de una Mesa de Acuerdos, “pedido lamentablemente desoído en el marco de las negociaciones paritarias, a pesar de que se trata de una saludable costumbre desarrollada con más de 20 años de probada eficacia que, sin explicación alguna, las autoridades se han empeñado en interrumpir”. Gerardo Ingaramo, presidente de la Federación que representa a las empresas de colectivos del interior, informó que ayer se reunirían con autoridades del Ministerio de Transporte nacional, de las provincias y de algunos municipios.
Lo harían con la intención de obtener “garantías de los recursos estatales” para cubrir el desajuste entre AMBA y las provincias, como también “la sustentabilidad del sistema de transporte”. “Si se aseguran estos fondos y la sustentabilidad del sistema, firmaremos (el acuerdo). Si no es así, no se firmará”, remarcó el empresario. Fatap intentará hoy cerrar un convenio salarial con la Unión Tranviarios Automotor (UTA – Interior) y así evitar un paro de los choferes en las distintas jurisdicciones del país.
“La tarjeta SUBE se debería incorporar en todo el interior”, enfatizó además, respecto de la distribución de las compensaciones. El directivo anunció una marcha federal para el 30 de junio. En ese contexto, Fatap, la UTA y otros actores del sector presentarán un petitorio ante el Congreso nacional. “No podemos más. Si en 60 días no se saca una ley, el transporte va a desaparecer”, apuntó.