Luciana circulaba en sentido Oeste por calle Don Bosco al 2000 en la capital tucumana cuando, de frente, ve circular a dos motos casi pegadas. De un lado un varón con casco, del otro una mujer. De pronto, el sujeto extiende uno de sus brazos y tira de la mochila de una joven, ante el intento fallido, ambos caen al pavimento y es entonces cuando nuestra heroína entra en acción.
“Fue un momento horrible, pero son reacciones que uno tiene. Yo venía justo detrás de ellos. Cuando los vi caer y vi que él quería levantarse para escaparse, aceleré y lo atravesé por el frente”, describe Luciana que, al notar la presencia de un policía y algunos transeúntes, comenzó a gritar para alertarlos de lo que estaba pasando. “La moto de él ya estaba sin asiento, había volado en la caída, era obvio que estaba escapando, entonces vino un vecino y lo redujo y después llegó el policía”, agregó.
Ya con el motochorro en el piso y sin la mínima vía de escape, Luciana sacó su celular y comenzó a tomarle fotos. Luego notó que la chica de la moto estaba lastimada y decidió asistirla.
“Ahora recién me vuelve la voz, me había quedado sin voz de tanto gritar, el problema es pensar demasiado a la hora de actuar, yo ni lo pensé. Tenemos que ayudarnos entre nosotros”, concluye la periodista heroína.