Minutos antes de la hora pautada para el inicio de la “mesa política” que convocó el presidente Alberto Fernández, el ministro de Economía, Sergio Massa se robó la atención con un millonario anuncio que reclamaba la Confederación General del Trabajo (CGT) y en especial el líder camionero Pablo Moyano.
El ministro de Economía hizo el anuncio de la ampliación de las asignaciones familiares para trabajadores registrados unos días antes de la visita de Massa a la CGT. Así Massa podrá mostrar el respaldo de los principales sindicalistas peronistas del país en una visita en la que también estará sobre la mesa el anclaje de la pauta salarial de cara a las paritarias 2023.
El ministro de Economía Sergio Massa, afín a mostrarse activo, confirmó junto a la directora Ejecutiva de la ANSES, Fernanda Raverta, que levanta el tope para las asignaciones familiares. Así, Massa se congració con Moyano, uno de los más insistentes en el reclamo de la “universalización de las asignaciones familiares”.
Hace más de un año, cuando Massa todavía era presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Moyano reclamaba por las asignaciones. El anuncio se da en medio de la fuerte suba de precios que no da tregua y tras el 94,8% en los 12 meses de 2022, con la inflación enero fue de 6%, según el índice de precios al consumidor del INDEC.
Esa cifra implica que la acumulación interanual asciende a 98,8%, cuando Massa insiste con los controles de precios que el propio Moyano pone en duda. Ahora Massa le da un gesto millonario con el que espera aplacar las críticas y recibir un espaldarazo en la visita que hará la semana que viene al edificio sindical de Azopardo.
Lo cierto es que, si la curva que marca el ritmo del aumento de los precios muestra una tendencia hacia arriba, la inflación también alcanza para derrumbar las promesas. Esto es lo que viene ocurriendo en los últimos meses. Los 6 puntos de la inflación de enero son más que los 5,1 de diciembre, que a su vez fueron más que los 4,9 de noviembre.
Esa escalerita ascendente derrumba cualquier plan de campaña que quiera sostener el oficialismo para tratar de mantenerse en el poder después de las elecciones de este año. En noviembre, Massa les dijo a sus funcionarios del Ministerio que esperaba una reducción de medio punto de inflación por mes y que ese ritmo permitía esperar un abril con tres puntos.
Esa predicción, que el ministro prefirió reservar para sus conversaciones en privado, se deshizo casi instantáneamente. El problema con ese escenario es que buena parte del Gobierno lo consideró posible. El año pasado también había comenzado con una curva apuntando hacia arriba.
La diferencia es que el nivel del punto de aquella partida parece, mirado con ojos de hoy, como algo deseable: cualquiera firmaría un contrato para recuperar aquel 3,9 de enero de 2022. Si no logra perforar este nuevo escalón de 6 puntos, Massa queda fuera de la carrera por la candidatura en el FdT. Y es por eso que busca congraciarse con Moyano en busca de apoyo.
