Hoy al mediodía se daría a conocer la sentencia contra Facundo Guerrero, acusado de ser el responsable del fallecimiento de Ana Ríos, la joven jujeña que murió en 2018 al caer al vacío desde el balcón de su departamento. Ana y Guerrero mantuvieron una relación durante años, y según el entorno íntimo de Ríos, su pareja ejercía violencia física y psicológica contra ella de manera constante.
En primera instancia, la hipótesis que manejaban desde la justicia era que Ríos había decidido ponerle fin a su vida, pero a medida que avanzaron las investigaciones, las pericias evidenciaron que hubo una pelea entre Ríos y Guerrero previo a su fallecimiento, por lo que la Querella y la Fiscalía solicitan la pena máxima para Guerrero. “Da bronca tener que estar reclamando, marchando y exigiendo justicia para que los jueces actúen y den una condena ejemplar” comentó Lila, una de las amigas de Ana presente en las puertas de Tribunales Penales.
Sus amistades describieron a Ana como una mujer admirable, con el firme proyecto de recibirse de Veterinaria y poder ayudar a los animales, contrario a las declaraciones de Guerrero que afirmaba que era una joven que no estaba enderezada en sus estudios, lo cual se desestimó enseguida al constatar la escasa cantidad de materias que le quedaban por rendir a Ana para recibirse. “Todo lo que dijeron de ella, en realidad se trataba de él” afirmó su amiga. “Exigimos justicia, dejen de cuidar al asesino y actúen con perspectiva de género” exigió.
