El hospital de El Hoyo cuenta con 9 camas, una sala de preparto, un servicio de laboratorio y radiología. “No tenemos guardias activas. Y después de las 14, hay médico a requerimiento de la situación”, agregó.
Advirtió que, al comienzo de la pandemia, elaboraron los protocolos para la atención de los diagnósticos de Covid. También solicitaron una sala de aislamiento para atender a los pacientes positivos que requirieran ser trasladados ya que “la derivación siempre demora y había que mantenerlos en el hospital” como así también la capacitación del personal.
Amat dijo que nunca recibieron una respuesta: “Hoy estamos muy preocupados porque nuestros hospitales de referencia, a 60 y 150 kilómetros, ya no tienen camas disponibles”. Expresó que “en el corto plazo, nos vamos a encontrar con que necesitamos internar en los hospitales rurales. Por eso, insistimos con la necesidad de esta sala de aislamiento, en lo posible, fuera del hospital”.
El Hoyo tiene 27 casos activos de Covid-19 en una población de 7.000 habitantes. “No podemos pensar que esto se va a amesetar sino que más bien tiende a profundizarse. Veníamos viendo esto y anticipándonos. Pero nunca fuimos escuchados. En salud hay que ser previsor y acá hay un abandono completo del estado”, objetó Amat.
Contó que el paciente que requería ser trasladado a un hospital de mayor complejidad el fin de semana fue internado “en una sala común del hospital rural. Había pacientes con otras patologías”. Amat insistió en que “el hospital rural no está diseñado para recibir pacientes infecciosos. De recibir pacientes Covid, deberíamos tener una sala especial, con un circuito distinto. Lo que no queremos es ser responsables de esta irresponsabilidad”.
