Cerca de las 21.30, el diputado Rodrigo de Loredo apareció en el búnker de su espacio y, rodeado de dirigentes nacionales de Juntos por el Cambio, reconoció la derrota en las elecciones para intendente de la ciudad de Córdoba y sostuvo de frente a los presidenciables: “Los hice venir al pedo”.
Al lado de De Loredo estaban los dos precandidatos presidenciales de la coalición, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, pero también un nutrido grupo de referentes radicales, incluido el líder de Evolución y aspirante a jefe de Gobierno porteño, Martín Lousteau.
“Quiero agradecerle a Martín, por tu empeño, tu compromiso, tu pelea; a Horacio, por tu predisposición, por haber venido varias veces; a vos, Patricia, también, por hacer lo propio, y al presidente de mi partido, a Gerardo Morales. Quiero agradecerles también a todos los dirigentes de mi partido, no voy a decir nombres porque seguro voy a pifiar, pero a todos. A Gustavo Valdés, gobernador de Corrientes, a Alfredo Cornejo, futuro gobernador de Mendoza. Los hice venir al pedo, les digo yo”. Y completó: “Somos una expresión que respeta la democracia y que entiende que sigue siendo Juntos por el Cambio la alternativa al kirchnerismo”, expresó.
De esta manera, De Loredo se mostró contento por la presencia de los “dirigentes nacionales de Juntos por el Cambio que vinieron con su prestigio y su trayectoria a validar las propuestas” que hizo durante la campaña.
“Nos ha tocado festejar acá en otros momentos, pero, aunque todavía no hay ningún dato oficial cargado hasta el momento, nosotros tenemos nuestro centro de cómputo, nuestras mesas testigo y ya tienen un nivel de avance en la carga que nos permiten reconocer que la diferencia ya está del otro lado así que queremos, ante todo, reconocer un triunfo y saludar a quien va a ser el próximo intendente de la ciudad de Córdoba, a Daniel Passerini”, había explicado antes de esbozar esa disculpa por el viaje sin foto triunfal.
De Loredo admitió la derrota sin que hubiera datos oficiales de la Junta Electoral. En ese sentido, precisó que decidió salir a hablar porque “los cordobeses se merecen esta claridad y esta precisión en momento tan importantes y sagrados, como lo es cuando emiten su voto”.
“Queremos agradecer inmensamente a todos los que han laburado en este proceso, a todos nuestros fiscales, presidentes de mesas, a todos los militantes de Juntos por el Cambio que han hecho un trabajo y un esfuerzo muy significativo, muy grande”, agregó.
Asimismo, el hasta ahora candidato a intendente cordobés destacó que realizó “una campaña que se llevó adelante con una férrea voluntad de hablar con propuestas, una tras otra durante 60 días”.
“No nos fue bien con la última propuesta, porque era que la gente fuera a votar. Bueno, ese sí es un sabor amargo que hay de este proceso, porque ha participado muy poca gente. Eso interpela muchas cosas, pero cada uno sacará sus cuentas”, señaló.
Durante su discurso, señaló que viene “planteando un aspiracional, que se mantiene, que es que Córdoba puede ser la ciudad número uno, y se trató de explicar bajo qué perspectivas se puede lograr eso”. Y sostuvo: “Ponemos a disposición todas nuestras propuestas, todas nuestras ideas, para que Córdoba obtenga esos resultados. Vamos a tratar de que los mismos se consagren en el futuro Concejo Deliberante y se pongan a disposición de quienes vayan a gobernar”.
Por último, De Loredo le agradeció, “fundamentalmente, a los 300 mil cordobeses” que lo votaron y con los que tiene “una responsabilidad inmensa”, y aseguró que su “compromiso sigue firme, como dirigentes políticos y como expresión para la Argentina”.
“A quienes no nos acompañaron, quiero decirles que también nos ponemos a su disposición y sabemos que tendrán sus motivos, sus argumentos de por qué no nos eligieron, tendrán sus preferencias, pero el pueblo se ha expresado y cuando el pueblo se expresa, es sagrado. Así lo entendemos los demócratas”, cerró.