Cuando el carcelero descubrió que estaba intentando ingresar droga a su pareja que estaba en un calabozo, la joven salió corriendo para evitar ser detenida, dejando a su pequeña hija y a la moto con la que había llegado al lugar. El insólito episodio ocurrió antes de ayer en la comisaría de Marti Coll, Yerba Buena.
La mujer, dejó sobre una mesa la comida para que el carcelero requisara un tüpper donde había colocado una porción de guiso de arroz. El guardia comenzó a requisar el recipiente y descubrió que entreverada con la comida había cinco envoltorios que contenían unos 10 gramos de marihuana.
La mujer, al verse acorralada, salió corriendo de la dependencia sin cargar a la pequeña. Policías al mando de los comisarios Eduardo Alazadme y Carlos Daniel Ruiz la persiguieron hasta que lograron detenerla. La Justicia Federal ordenó la detención de la mujer, pero bajo la modalidad de arresto domiciliario.
Cabe mencionar que, como los uniformados encontraron en la moto de la mujer unas cuantas tarjetas de débitos a nombre de otras personas, cupones de extracciones de cajeros automáticos y $30.000 efectivos, se procedió a iniciarle una causa por presunta estafa en la fiscalía de Delitos Complejos.
