En una intervención del equipo de endoscopia del Hospital del Niño Jesús, liderado por el Dr. Carlos Mariotti, ha marcado un hito en la medicina pediátrica. Un recién nacido, con un quiste de cuerdas vocales que obstruía más del 90% de su vía aérea, ha sido operado con éxito, permitiéndole respirar sin dificultades y mejorar su alimentación.
El Dr. Mariotti, jefe del servicio de Endoscopia, describió la complejidad del caso, señalando que el quiste causaba “una dificultad respiratoria importante y una disfonía marcada”. La cirugía, realizada en un paciente de apenas 29 días de vida y con un peso de 2,900 kilos, requirió de técnicas avanzadas como ópticas para magnificar las imágenes, tijeras laríngeas y agujas especializadas.
La operación, calificada por el especialista como una “cirugía microscópica de gran precisión”, fue crucial debido a que el tamaño del quiste representaba una amenaza significativa para la respiración del niño. Las imágenes previas a la intervención mostraban un hundimiento de pecho y la necesidad de oxígeno. Posteriormente, el paciente mostró una recuperación inmediata y alentadora.
El Dr. Mariotti también destacó la mejora en la capacidad de alimentación del niño y su aumento de peso, evidenciando los beneficios tangibles de la cirugía. Sin embargo, advirtió sobre la posibilidad de recurrencia del quiste, lo que requiere seguimiento constante. El año pasado, el Dr. Mariotti llevó a cabo una operación similar en el sistema público, tratando un quiste supra glótico.
El seguimiento postoperatorio es riguroso, con revisiones frecuentes para prevenir cualquier signo de dificultad respiratoria o alimenticia. El éxito de la operación no solo se atribuye a la destreza del Dr. Mariotti, sino también al trabajo en equipo junto al Dr. Matías Gómez Molina, y los enfermeros e instrumentadores Mario Ortiz y Raquel Robles.
El equipo trabajó en un espacio reducido, manejando un instrumental delicado para tratar el quiste que ocupaba casi todo el campo quirúrgico. Finalmente, el especialista expresó su gratitud hacia el Ministerio de Salud Pública y el Hospital del Niño Jesús por su apoyo y los recursos proporcionados, que han hecho posible estas intervenciones vitales. Con esperanza, el equipo anticipa la llegada de nuevo equipamiento que permitirá continuar avanzando en este campo.
