Rosa Alejandra Céliz (53), la primera víctima de femicidio de este año en Tucumán, ocurrido en la localidad de Estación Araoz, hizo un desesperado intento de salvar su vida, pero no pudo escapar a la saña de su agresor.
Según se desprende de las primeras pericias practicadas en el domicilio donde se desencadenó el brutal ataque, la mujer intentó correr cuando comprendió que su vida corría peligro, pero fue en vano.
Su esposo, Raúl Eduardo Albarracín (68), la atacó blandiendo un hacha con la que le produjo varias heridas muy severas en el rostro y el pecho, tras lo cual la mujer, malherida, alcanzó a salir a la vereda en busca de ayuda.
Esto último es lo que vio el testigo que acudió a la comisaría del pueblo para poner sobre aviso a la Policía, pero cuando los primeros uniformados llegaron al lugar Rosa ya había dejado de existir.
Desde el punto de vista judicial, el caso parece resuelto, ya que Albarracín salió casi al encuentro de los efectivos policiales diciendo “lo hecho, hecho está, soy el marido, yo la maté”, pero las causas sólo se sabrán cuando declare.
Por lo pronto los vecinos de la pareja están consternados y sorprendidos, ya que aun tratándose de un pueblo chico, poco y nada sabían del matrimonio, y no conocían indicios acerca de desavenencias conyugales.
