Luego de más de un mes desde que inició el juicio, se dio a conocer la sentencia para los 3 imputados de haber participado de una violación grupal en la localidad de burruyacú, el 7 de marzo de 2021. La resolución de este caso sentenció a Benjamín Padilla, a Hugo Décima y a David Aranda a 10, 9 y 8 años de prisión, respectivamente.
Familiares de la víctima denunciaron los constantes hostigamientos por parte del entorno de los imputados desde el momento posterior a que la víctima hizo efectiva la denuncia policial. Según informó Lucía, prima de la víctima y una de los principales referentes de encabezar todas las movilizaciones para poder visibilizar este hecho, los familiares de Padilla intentaron comprar el silencio de su prima en más de una ocasión. “Pensaron que por ser una persona humilde y del interior ella iba a dejar de lado todo el avasallamiento que cometieron contra ella” sostuvo Lucía.
La violencia sistemática que recibió la víctima por parte de los abogados defensores y de los familiares de los acusados es una de las marcas más fuertes que dejó este caso. Los letrados hicieron foco en situaciones personales de la vida de la víctima que no tenían relevancia en este caso, por lo que Lucía no dejó pasar este hecho: “Fue un juicio donde ella constantemente recibió la violencia machista por parte de los abogados, de los imputados y de los testigos, fue denigrada por todos ellos”.
Benjamín Padilla es el más complicado en esta causa, ya que sus familiares amenazaron en reiteradas ocasiones a la víctima, e incluso la madre de Padilla amenazó a la víctima antes de ingresar a tribunales para conocer la sentencia. “La mamá de Padilla amenazó a mi prima y le dijo que le iba a dejar del ojo morado” finalizó Lucía, al mismo tiempo que no descartó la posibilidad de apelar este fallo para poder incrementar los años de prisión para los acusados, ya que entienden que esta sentencia fue insuficiente.
