Vacunación Dengue

Sergio Massa apunta a venderse como el responsable de evitar la explosión, aunque siga el incendio

El ministro lo niega, pero sigue trabajando para ser candidato y trata de hacer equilibrio entre el precipicio y sus ilusiones para octubre.

sergio massa
Sergio Massa
Vacunación Dengue

Este martes, cuatro años más tarde, el mismo billete verde, pero en su versión blue, tocó los $421. El valor del dólar es apenas una de las cifras horribles que la realidad criolla nos tira por la cabeza un día sí y otro también. Sobre el número, tremendo, tan enorme como la plusmarca de 397.788 millones de dólares que alcanza la deuda pública nacional de acuerdo con lo publicado este lunes por la Secretaría de Finanzas, no se escuchó en cambio palabra del máximo responsable del área, el ministro Sergio Massa.

Tal vez porque el protocandidato presidencial oficialista comulga con el viejo principio político de ausentarse en las malas, pero asistir a las buenas, en lo posible exagerándolas. Pudo comprobarse con el acto montado en Economía para presentar los avales de Argentina para ser sede del próximo Mundial Sub-20. Se sabe: el país no había calificado para la competencia, pero ante la imposibilidad de que su anfitrión original, Indonesia, lo concretara, Chiqui Tapia vio un hueco en la ventana y entró.

Asistencia Pública

Massa, por su parte, vio que por fin podía prenderse a una buena y, gracias a su impecable relación con Tapia, se sumó. Desde el engrasado aparato de difusión de su ministerio partieron entonces los fuegos de artificio. Según los datos propagados, resulta que el Mundial Sub-20 sería un negocio maravilloso para el país: “La Argentina podrá, además de disfrutar a la selección, tener un impacto adicional de ingreso en su economía de más de 600 millones de dólares”, afirmaron.

Movilidad

Gracias a cálculos algo misteriosos, en Economía estimaron que entre el 20 de mayo y el 11 de junio, lapso en el que se disputará el campeonato, llegarán 230.000 turistas, que se quedarían en promedio una semana y que gastarían cada uno unos 200 dólares diarios. “Se estima que el efecto sería un aumento de al menos un 5% anual a partir de este año, lo cual representa más de 360 mil nuevos turistas al año y un aumento del ingreso anual de divisas cercano a US$ 300 millones”, aventuraron.

Este número, tan difícil de probar como de rebatir, se habría calculado teniendo como referencia el impacto que tuvo, en Alemania, la Copa Mundial 2006, donde festejó Italia al vencer en la final a la Francia de Zidane. Curioso, cuando menos. Cerruti dixit: hablar “de cualquier cosa para tapar el derrumbe”. El episodio es significativo también porque reafirma lo que en público se niega: Massa trabaja para ser candidato a presidente.

Aún hoy. Con el 7,7% de inflación, el dólar a $420, la deuda récord y la pobreza arriba del 40%. Porque apuesta a que la inflación baje un poco -no ya con un 3 como primer dígito, con un 6 es suficiente- y a que el dólar corra, pero no vuele. Con eso le alcanza para venderse como el responsable de haber evitado, aunque siga el incendio, la explosión. Cuando asumió, en agosto, y ahora también. De mejorar la economía no hablemos, claro.

Banner Tucumán Despierta
Banner Tucumán Despierta

Además, en el país de los ciegos, el tuerto es rey: su competencia interna no parece hacerle verdadera sombra. En especial si logra el apoyo de Cristina. Asunto cocinado. Encima, no son imposibles ciertos resultados que lo favorecerían. ¿Y si en octubre la competencia es entre él, Rodríguez Larreta y Milei y los votos duros opositores viajan hacia el libertario? ¿Qué pasaría en un balotaje entre Massa y Milei? Aun perdiendo, Massa quedaría como líder de la oposición. Nada mal como premio consuelo.

Dejanos tu Comentario