Por estos días, la Legislatura de Tucumán aloja una de las discusiones del momento: el nuevo horario corrido comercial, que pretende llevar la atención al público de 09 a 18 h. Una medida que, entre otras cosas, tiene como argumento la calidad de vida de los trabajadores de este sector que, en muchos casos, deben realizar hasta cuatro viajes de colectivos por día, con todo lo que eso implica en Tucumán en la actualidad.
El legislador Hugo Ledesma, autor del proyecto de ley, uno de los más controvertidos e importantes de los últimos años por el debate generado, defendió su iniciativa ante los micrófonos de la prensa. “Este no es un tema que se nos ocurrió el mes pasado o porque subió el boleto del colectivo, acá se trata de que el boleto ha convertido la situación en algo que no da para más, pero es el mínimo factor de incidencia en esto”, explicó el parlamentario.
Quien asegura que el transporte público impacta sobre el 20% del sueldo de los empleados de comercio. “No hay persona que escuche la problemática del empleado de comercio y no diga que se tiene que producir un cambio”, agregó. Entre las razones que esgrime Ledesma para defender su proyecto están la poca calidad de vida de los trabajadores, quienes por los horarios se ven impedidos de realizar vida familiar, recreativa o incluso formarse para buscar mejores oportunidades.
Además, habla de una falta de sinceramiento de los horarios, ya que en muchos casos los empleados se quedan media hora o más en sus trabajos para completar actividades que no pueden realizarse mientras se atiende al público, como ser el cierre de cajas o acomodar los productos para el día siguiente. “Como sociedad no podemos mirar para otro lado. El horario corrido solucionaría un tema importantísimo para nuestra ciudad”, insistió Ledesma.
Que también defiende el sentir y voluntad de quienes viven de esta actividad. “Los trabajadores no comen vidrio, ninguno pediría nada si creyeran que su sustento de trabajo puede cerrar”, subrayó. Ante las críticas provenientes de bloques legislativos de la oposición y también de la Cámara de Comercio de San Miguel de Tucumán, quienes comparan la situación con la pandemia, el legislador pone como ejemplo negocios como la zona de El Bajo, donde las ventas son regulares incluso en horario de la siesta.