En medio de la sesión en la Cámara de Diputados, en la que se debate la eliminación del Impuesto a las Ganancias, el diputado Carlos Cisneros expresó su orgullo como dirigente sindical y resaltó la importancia de este día para los trabajadores. Además, arremetió contra aquellos que critican a la dirigencia sindical y destacó la relevancia de esta medida en el contexto político argentino. En ese sentido, ligó a su par tucumana Paula Omodeo (Juntos por el Cambio) con la cartelización de la obra pública durante el alperovichismo.
El legislador del Frente de Todos y referente nacional del gremio bancario comenzó su discurso enfatizando la significativa importancia de este día para los trabajadores argentinos, pues la discusión en el recinto gira en torno a la eliminación del impuesto a las Ganancias, un tema que ha sido objeto de largos años de debate y lucha por parte de los trabajadores y sindicatos.
“Estamos aquí para eliminar el impuesto a las Ganancias. Para nosotros, dirigentes sindicales, estamos orgullosos. Veníamos peleando desde el 2010 para que esto sucediera. Le hicimos 10 paros a Cristina Kirchner. Eso muestra que no es una cuestión política”, enfatizó Cisneros, destacando que esta lucha trasciende las fronteras partidistas y se centra en el bienestar de los trabajadores.
Cisneros recordó además los años de lucha y los intentos previos de eliminar el impuesto a las Ganancias. “Nosotros también presentamos proyectos en el año 2012, y creo que una de las fortalezas de Sergio Massa es que en el año 2013 ya se oponía al impuesto a las Ganancias”, señaló. Además, no dejó de mencionar la promesa incumplida del ex presidente Mauricio Macri: “Macri dijo que iba a eliminar el impuesto a las Ganancias y nunca lo hizo. No le interesó”.
El diputado oficialista elogió al ministro de Economía y destacó la importancia de tener un político que comprende las necesidades de los trabajadores en ese cargo crucial: “Gracias a Dios que el ministro de Economía es un político que entiende las necesidades de los trabajadores”, afirmó Cisneros, sugiriendo que esta perspectiva política es esencial para tomar decisiones que beneficien a la mayoría de los argentinos.
En los últimos tramos de su discurso, el diputado instó a sus colegas a mantener un nivel de respeto en el recinto: “Yo veo en este recinto ser vulgar, ordinario, como a esos que se les sale la cadena y actúan de manera peyorativa… hay que respetar, tratemos de escuchar”, reclamó, y abogó por un debate civilizado y respetuoso en la Cámara de Diputados.
“¿Saben por qué los trabajadores se identifican con el peronismo? Porque los demás partidos le tienen asco a los trabajadores y le tienen asco a la dirigencia sindical”, dijo el diputado, que concluyó su discurso con una crítica hacia aquellos que critican a la dirigencia sindical (ese discurso caracterizó la intervención de la diputada Omodeo, que habló de “castas”). “Lo que no me banco es la hipocresía de quienes han sido ñoquis del gobierno de Cristina, precisamente de Carlos Zanini, de quienes participan de una casta que carteliza la obra pública en Tucumán vengan a hablar mal de los dirigentes sindicales”, remató el diputado.
