En una entrevista exclusiva con el presidente de la Cámara de Comerciantes Minoristas de Yerba Buena, Esteban Lamontanaro, el dirigente comercial habló con Tucumán Despierta y contó la ola de inseguridad que azota al municipio que comanda el intendente de Yerba Buena, Mariano Campero. En ese marco, manifestó que también a nivel comercial son víctimas de una ola de robos importantes.
En ese sentido, agregó que estos robos se incrementaron después de las fiestas. Explicó, que cuando el programa de prevención implementado por el gobierno provincial terminó y comenzaron las vacaciones, se comenzó a ver mucha menos presencia policial y que directamente a la GUM no se la ve. Al respecto, mencionó que la inseguridad se viene acrecentando fin de semana tras fin de semana.
Al respecto, hizo hincapié en el hecho de que la inseguridad es tan notable que a 50 metros de la sede de la municipalidad de Yerba Buena, en la noche del sábado rompieron la vidriera de un comercio y entraron a robar como si nada. Otro tanto ocurre últimamente en la avenida Solano Vera y en otras avenidas principales. Es por ello que se preguntó si estará funcionando como corresponde el centro de monitoreo.
Muchos de los comercios que están en Yerba Buena, son comerciantes que se mudaron a la Ciudad Jardín en busca de seguridad y de una vida próspera, señaló Lamontanaro. Pero admitió que en estos momentos hay una falencia en el tema seguridad importante. Los robos y los asaltos están siendo cada vez más violentos y a plena luz del día, reconoció y apuntó que en estos momentos Yerba Buena parece tierra de nadie.
Además de los motochorros y de los rompevidrios, destacó que al sector comercial lo afecta más que nada las entraderas que se producen de noche, es decir, los robos nocturnos y hay sectores, como la avenida Solano Vera que sufre asaltos a mano armada y a plena luz del día, algo que no era habitual hasta hace poco tiempo. Por otro lado, remarcó que volvió la modalidad del robo por medio de inhibidores de las alarmas de los autos.
Más que nada, según señaló, en lo que hace a la zona bancaria de la avenida Aconquija y en la avenida Solano Vera al 400 y al 500. Es por ello que Esteban Lamontanaro opinó que lo sucedido deja a las claras las falencias del estado provincial y municipal en lo que hace a la seguridad, ya que ambos se pasan la pelota de unos a otros y sólo expresan que no tienen los recursos necesarios y no se hace nadie responsable.
Se vive y se trabaja en peores condiciones, lamentó el dirigente comercial, mientras que lamentó que lo que se vive bajará el estatus de los sectores comerciales de Yerba Buena, ya que roban en plena avenida de la Ciudad Jardín. En ese marco, acerca del papel del intendente Mariano Campero, dijo que en los últimos años la inseguridad se incrementó claramente.
Según opinó, esto se debe al hecho de que el municipio no acompañó la política de seguridad del gobierno provincial y ambas partes no han demostrado estar a la altura de las circunstancias, razón por la cual es cada vez más grande la ola de inseguridad, por lo que la seguridad y la hermosa calidad de vida que tenían los habitantes de Yerba Buena, se está perdiendo con esta ola de inseguridad y asaltos.
